Estar mal no está mal

¿Alguna vez te has sentido como si no pudieras o tuvieras el derecho a caer?
Como si fueras el único pilar que agarra una casa y si te caes todo se cae contigo.
La mayoría de personas que conozco piensan que soy tremendamente fuerte, que a mi no me afecta nada.
Ellos piensan que por tener una sonrisa en mi rostro estoy bien, pero por dentro no es de este modo.
Primeramente diré que para mi este asunto no es fácil.
Yo ya lo veía venir y no es la típica frase que cada padre dice cuando te dicen algo sobre tu hija.
Cuando mi hija tenía solo seis meses le ponía juguetes en fila y le pedía que me diese este u otro, ella siempre me daba el que yo le pedía. Tengo vídeos sobre ello.
A medida que iba creciendo, iba notando que algo no era como debía, aunque nunca supe por que mi instinto me decía esto. Pero siempre me e guiado por él.
Utilizaba más la cabeza, la lógica.
Aprendía rutinas, caminos y hasta sabía que paso iba a dar yo, que iba a hacer.
Antes de aprender a caminar ya sabía cambiar un video en el teléfono, o sabía que botón darle para bloquearlo y desbloquearlo.
Y estas son cosas simples.
Pero una cosa es cuando tu lo notas y otra muy distinta es cuando te confirman.
El principal "problema" que veo es que utiliza tanto la cabeza que no evoluciona al mismo ritmo físicamente dado que hay cosas de psicomotricidad que debería hacer hace tiempo y aún no es capaz.

Ella no comenzó a saltar hasta no hace mucho y hace poco está aprendiendo a saltar a la pata coja.
Aun así no salta con los pies juntos si no como si estuviera dando pasos.
No sabe abotonar o desabotonar, coger una pelota después de rebotar o caminar por una linea recta.

Estas son cosas que estamos trabajando con ella poco a poco en atención temprana ya que no solo el intelecto es importante y ya hemos visto que supera con creces las expectativas.
También es importante que aprenda cosas básicas como doblar una hoja de papel o cortar con tijeras o incluso agarrar un lápiz correctamente.

El caso es que todo el mundo se piensa que es fácil, te dan un papel con instruciones, ves a la psicologa una vez en semana o cuando sea necesario y ya está, solo sigues pautas. Pues no...
Hay días que las pautas son imposibles de llevar, días que vive en su mundo y no puedo ni hablarle por que no me escucha, no me atiende.
Hay días que pide ir al baño y días que se lo hace encima. Hay días que colabora, pone y quita la mesa, ayuda a quitarse la ropa. Y hay días en las que sólo con el hecho de ponerle la camiseta tardamos casi media hora, que es imposible tocarle el cabello por que grita y golpea.
Días en los que se golpea como si estuviera buscando el dolor y no lo entiendo.
Mi cabeza no puede entender por que cuando un niño se cae necesita brazos de su mami y en cambio cuando mi hija se cae no quiere ni que la toque.
A veces está más maniática y no puedo ni pelarle un plátano por que si no hago ella grita y llora sin consuelo y sí, para muchos es algo bobo pero es con todo.
Si no consigue coger la pelota, si no está el tenedor sobre la mesa, si no consigue abrir un yogur, si no puede tirar de la cadena sola, si no consigue encender la tele sola...
 Y no importa si tu le dices "no pasa nada cariño, yo te ayudo" por que ella no acepta ayuda.
Es como si ella misma quisiese demostrar que ella puede, y sí que puede pero cuando está centrada, cuando está centrada hace todo esto y más, incluso se prepara un sandwich sola.
Pero cuando está en esos días llora si el pan tiene corteza, llora si se la quito. Llora si no a cogido ella la mantequilla o si no es el cuchillo que ella quería.
Y llora y llora y llora.
Y se duerme, nos vamos a la cama preguntándonos si el día siguiente será un buen día o será uno de estos días.
Como una ruleta rusa.
No, no es fácil y psicologicamente a veces me siento hundida y en ocasiones como la de hoy, cuando estoy sola en casa aprobecho para estar para mi pero siempre acabo llorando un buen rato hasta que me siento bien y desahogada como para lavarme la cara y seguir adelante.
Por que no es fácil ni cuando te lo dicen, ni cuando lo cuentas a alguien y éste lo niega diciendo "es una niña normal" y por dentro tu recuerdas las crisis, las pataletas, los llantos por que no es como ella quería, los nervios por que no es capaz de encontrar una rutina o una simetría o los gritos tapandose los oídos cuando hay demasiado ruido.
Y mientras en esos momentos yo me siento tan impotente por que ella no me deja acercarme a consolarla y joder, duele ver a tu hija gritar y llorar desconsolada y no poder ni tomarla en brazos.
A veces solo necesito que me digan "si necesitas algo, dimelo".
Aunque nunca se lo diga, pero saber que alguien está ahí, que me entiende y que es capaz de aprender para saber como llevarla.
Por que a veces agradecería un poco de comprensión o simplemente saber que alguien está ahí.

Odio oír un "para que le compras cascos? que tontería" de personas que no la han visto gritar por que hay demasiado ruido mientras se tapa los oídos.
Odio un cambio de última hora en el que no puedo ni avisarle por que cuando llega la noche yo soy quien la consuela cuando grita y llora.

A veces ser fuerte cansa tanto.... pero yo no puedo permitirme rendirme, nunca lo he hecho y menos ahora.
Pero joder, como duele que no te entiendan.



Comentarios

  1. Todo duele... hasta estar tranquilos cuesta.. lo pagas con el recuerdo de lo mal que paso en el resumen de la semana, a lo mejor fuimos hechos para soportar, soportar y soportar.... No ser sumisos por que un dia nos rebelamos ! Quizas eso quiere decir cuando no necesita ayuda y quizas tu si te sientes en culpa por no poder ayudarle como ella quiere pero logras ayudarle como ella deberia de ser ayudada pero no entiende aun por que aun esta Creciendo :) Una parte de esta frase la oi del grupo de rock " Ni voz ni voto "

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares