Tarde en urgencias.

Como dije hace un par de días el dolor del brazo me estaba matando y ya no podía hacer nada.
Ni fregar los platos!
No sé ni como pude ir al trabajo por que el simple echo de caminar ya hace que me duela.
A veces me duele tanto que hasta respirar es horrible.
Cuando fuí a la doctora de urgencias de mi centro de salud no tardó demasiado en decirme que lo que tenía era una contractura enorme y de ahí todo el dolor y que debía hacer reposo y aplicar calor local entre otras cosas.
Me dijo que me pondrían una inyección para bajar la inflamación y le dije que toda la tarde estaría sola con la pequeña, entonces ella dijo que me pincharía otra cosa que era igual pero que no daba sueño ya que como le dije ella es un terremoto y necesito estar completamente pendiente de ella, no me gusta ni quiero tomar nada que me adormezca cuando estoy con ella por que ya sabemos que los niños un sólo despiste y nos llevamos un disgusto. Ellos no conocen el miedo.
Cuando fuí a la sala donde estaba la enfermera (todo esto con mi gordita por que acababa de salir de la guardería) le dije a mi gordita "bueno, voy a tener que ser fuerte para que cuando te toque pincharte a ti no llores". Pensé que me dolería horrores por que aparte de no gustarme nada las agujas (si, es irónico que tengo 9 tatuajes en mi cuerpo y no me gustan) la última vez que me pincharon en el "culete" me dolió muchísimo.
Recuerdo que fué por un dolor en el lumbago que me llegaba hasta la rodilla y más, yo caminada curvada, no podía ni andar! Pinchazo y diazepan cada noche durante tres días y solucionado.
Pero bueno, ahí estaba yo mirando a la enfermera con cara de "me puedo morir ya?" mientras ella sin sutileza ninguna (pa que?) me enseñaba la aguja. Yo cagaita de miedo por supuesto.
"A ver ese culete". y yo ni corta ni perezosa me puse de espaldas y me baje el pantalón, eso si, cerrando con fuerza los ojos antes. Por supuesto!
Cuando abrí un ojo llena de miedo y preguntandome por que tardaba tanto ella solo me miró y me dijo.
"Hace rato que te pinche"
Os juro que si no veo la jeringuilla no me lo hubiera creído. ¡increible!
Por favor, que la próxima vez que me toque analítica sea ella quien me pinche que soy difícil para eso hahaha
Sin bromas, siempre me pinchan cinco o seis veces hasta que dan con la dichosa venita, ya es que me siento y digo "está aquí" señalando el sitio donde por fin cantan victoria y consigen sacar una muestra. Pero no, les gusta experimentar con mi brazo

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